25 May Equilibra Tu Vida y No Pierdas el Balance
¿Una vida Balanceada?
Seguramente algunas personas te han mencionado lo importante que es tener una vida balanceada. Muchos lo harán desde una buena intención con el objetivo de ayudarte y otros tal vez con alguna agenda oculta tratando de generar en ti alguna culpabilidad por tu estilo de vida.
Sin embargo, muchas de las personas –sin importar la intención- no saben con certeza de qué se trata esto de tener una vida balanceada.
Escucha este episodio aquí ??
No es una fórmula matemática
Muchos se preguntan cómo se puede llevar una vida balanceada. Inicialmente hay que aclarar que los basamentos que han sustentado esta premisa han sido una total falacia:
Cuando tú miras algo que está “balanceado” te das cuenta que no tiene movimiento.
Generalmente cuando se habla de balance, lo que se plantea es una especie de distribución porcentual que nos permita atender cada una de las diferentes actividades de nuestras vidas: la casa, la familia, el trabajo, para así lograr tener todo bajo un supuesto orden. Cómo una fórmula mágica en nuestras vidas.
No hay fórmula matemática que garantice una exacta distribución de nuestro tiempo y acciones para así lograr el tan anhelado “balance”.
En este artículo exploraremos elementos sustanciales que desmontan lo que inicialmente la mayoría de las personas –incluyéndote a ti misma-, piensan sobre este tema.
Iniciemos con una nueva premisa
Cuando partimos de la premisa de fraccionar obligatoriamente nuestras acciones diarias, sin más motivos que buscar atender todo bajo un orden y sentir que estás haciendo lo correcto sólo por cumplir con un estándar; el resultado de la afectividad de tus acciones puede que no sean lo esperado.
En este sentido; te propongo partir de una nueva premisa:
Una vida balanceada inicia cuando dedicamos el 100% a todo lo que consideramos importante en nuestras vidas.
¿Cómo podemos lograr esto?
Inicialmente tomar en cuenta que más allá de buscar el balance perfecto, es importante encontrar un equilibrio en nuestras vidas.
Compartiré con ustedes una reflexión de alguien importante en mi vida que me ayudó en lo personal, a remover la culpabilidad:
Los trapecistas; esos personajes que nos alegran y entretienen en los espectáculos circenses. Estos profesionales caminan en la cuerda floja desde una altura sorprendente. Ellos necesitan encontrar el equilibrio para poder seguir caminando. Sí se balancean, tendrán que quedarse en un mismo punto parados y, aun estando en el mismo lugar “balanceados”, sino no hay avance o movimiento: se tambalean.
¿Qué hace el malabarista para llegar al otro lado? Buscar el equilibrio para poder seguir avanzando y llegar al otro extremo de la cuerda: su meta.
No es negar el balance en nuestras vidas, es entender el movimiento que este necesita: esa búsqueda del equilibrio que te permite estar balanceado y no caer y poder llegar… poder avanzar.
El equilibrio llega cuando podemos dedicar el 100% a eso que deseamos. No una atención a medias: un fin de semana completo en familia; un compartir en plenitud sin interrupciones de otro tipo de actividades que te fraccionan la vida. De ese mismo modo, puede ser un fin de semana entregada al trabajo y así.
¿Qué nos puede pasar en esa búsqueda del equilibrio?
Muchas veces nos pasa que el remordimiento nos invade. Puede llegar un sentimiento de culpabilidad por no atender las otras actividades que creo debo atender. Por eso es tan importante tener claridad de cómo es el proceso. Recordemos la anécdota del malabarista.
En estos casos, también es importante analizar el contexto de nuestras vidas, para crecer hay que moverse, para aprender hay que moverse… avanzar. Eso nos exige desarrollar nuestro criterio para poder discernir en qué voy a dedicar mi tiempo y en qué momento debo hacerlo sin culpabilidad o remordimiento.
La sabiduría radica en saber a qué debo dedicar mi tiempo y cuándo hacerlo para poder seguir avanzando y crecer.
Cómo alcanzar el equilibrio
- No permitas que otros establezcan lo que es conveniente para tú vida: no debes vivir por los estándares de otras personas. No te dejes imponer los patrones de alguna otra persona y ésta ejerza presión para balancear tu vida. La única que debe saber qué requieres para tu equilibrio eres tú.
- Pon toda tu atención en la actividad que estés desarrollando. Pon el máximo empeño en esa área.
- Involucra a toda tu familia en todas las áreas de tú vida y así pasarás más tiempo con ellos.
Tú puedes hacer todo bien. Lo que no puedes es hacer todo en el mismo tiempo. Ahí es donde tu sabiduría bebe dar frutos: escoger, dedicar y avanzar.
Aneri Rodriguez
Posted at 07:49h, 02 JuneBuenos días, excelentes ideas, gracias por compartir sus experiencias,empezare aplicarlas de acuerdo a mis requerimientos.
Dios la bendiga, y bendiga a toda su familia. Es bueno saber que no todo se puede hacer al mismo tiempo.