24 Feb 38: ¡Contagiémonos de buenas conductas y seamos mejores personas!
38: ¡Contagiémonos de buenas conductas y seamos mejores personas!
Hoy el mundo ha experimentado transformaciones que han trastocado la realidad de todos. Una pandemia que nos obligó a repensar muchos de nuestros planes, incluso; las formas de relacionarnos. La economía y la política en todos los países del mundo tuvieron transformaciones drásticas, con resultados positivos para unos, y muy negativos para otros.
Una de las cosas más comunes, y tal vez más complejas por la que ha tenido que atravesar la mayoría de las personas, son a causa del distanciamiento social que ha tenido como consecuencia el cambio drástico de muchas formas y estilos de vida.
El miedo al contagio también ha afectado la emocionalidad de muchas personas. Teniendo como consecuencia, no solo el distanciamiento social, sino una marcada lejanía (más allá de lo físico) para con los otros, así como también un reforzamiento de las relaciones con las personas más allegadas a nuestro entorno familiar más cercano.
5 conductas especiales que nos hacen mejores personas
Así como nos cuidamos del contagio del coronavirus, debemos cuidar lo que cultivamos en nuestras almas y en nuestro ser. Lo que proyectamos de nosotros mismos con el objetivo de ser mejores personas…mejores cristianos.
Durante la pandemia hemos escuchado infinidad de veces la palabra contagio, pero en esta oportunidad vamos a darle otra connotación que nos invite a trabajar de manera positiva esas buenas conductas que cultivamos y deben ser totalmente contagiosas para que así las buenas acciones se multipliquen.
- El buen humor: la alegría es medicinal. Dios nos dio la habilidad para poder controlar nuestras emociones. Y esa habilidad hay que usarla para bien, pese a que existan dificultades. Mantener una buena actitud y un buen humor nos brinda la energía necesaria para poder conseguir motivos para seguir adelante. Para ver siempre las bondades que nuestro Señor nos puso en el camino. Contagiarte y contagiar a otros el buen humor es una llave que nos abre mil puertas al bienestar.
- Optimismo: muchas veces pensamos que el ser optimistas es evadir la realidad, por el contario, el optimismo nos permite observar la realidad tal y como es, pero de esa realidad escoger los elementos positivos que trajo con ellas, para poder así construir nuevas y mejores realidades. Si te centras sólo en lo negativo, no podrás avanzar, en cambio viendo el lado positivo de las cosas podrás gozar de las bondades que nuestro Señor todo poderoso tiene para cada uno de nosotros.
- Buenos modales: los buenos modales mejoran la convivencia entre las personas. En ese sentido, cultivar esta conducta es garantía de propagar un valor tan fundamental como lo es el respeto hacia los demás, a generar empatía, y por supuesto, a consolidar relaciones interpersonales sanas que son tan importantes en todo momento y en el contexto de un confinamiento, es una bendición el poder mantener una convivencia basada en el amor y el respeto hacia los demás.
- Los buenos hábitos: a diario realizamos acciones que se vuelven costumbres. Así como podemos tener el hábito de tomar un cafecito en las mañanas, podemos tener hábitos más asociados al desarrollo de nuestra personalidad. Por ejemplo: hay personas que tienen el mal hábito de no dormir bien. Dan prioridades a otras cosas que podrán organizarse de una mejor manera para poder cumplir con el descanso que es tan necesario para la salud. Cultivar los buenos hábitos y superar los negativos es un ejercicio necesario para poder lograr nuestro máximo potencial y mantener una salud mental y física necesaria para la vida misma. Si tienes dudas para identificar cuáles son los hábitos que debes erradicar y cuáles debes cultivar busca la palabra de Dios y las sabias escrituras y ahí encontrarás todas las respuestas.
- Deseo de superación: una buena actitud hacia la vida nos ayuda a ver siempre el camino que Dios tiene para nosotros. Las ganas de seguir adelante van de la mano de la nuestra fe y de nuestra creencia en nuestros Señor. En ningún momento se dijo que el camino sería fácil, pero siempre nuestro Dios tiene preparado para cada ser viviente un propósito que estará lleno de bendiciones.
¿De qué manera de haz contagiado de buena conducta?
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