18 Oct Por qué toda mujer debe tener sueños
¡Sueña!
Mas allá de lo evidente
El sueño es una visión audaz de tu futuro que te asusta y te emociona al mismo tiempo.
Toda mujer tiene que tener sueños. Los sueños son esa visión que nos permite diseñar nuestra visión de futuro – así como un arquitecto diseña maravillosas obras-debemos tener sueños que nos permiten crear realidades.
Una vida sin sueño, difícilmente se pueda ver materializada en realidades que nos inspiren. Siempre partimos de una idea, de un deseo, de un anhelo: de un sueño… ese algo que nos da la motivación para generar las acciones necesarias para convertirlos en realidad.
En nuestras visas cotidianas solemos creer que ya hay una ruta “normal” o “natural” que debemos seguir: estudio, trabajo, familia. Todo eso es importante. Pero para poder tener una vida más allá de común, es necesario asumir nuestros sueños que, en muchas ocasiones, no los han vendido con la falsa idea de “no tener los pies en la tierra” y solo apostar a lo “seguro”.
Mujer, tú puedes estudiar, puedes trabajar y tener una hermosa familia. Ahora bien, apoderarse de los sueños y volverlos realidad te da otros matices y te brindan otros desafíos que te darán éxitos y felicidad.
Se trata de estudiar lo que te apasiona, de trabajar en lo que te gusta hacer de trabajar por construir una familia en armonía.
Solo apoderándote de tus sueños, de ver más allá de lo evidente y dar más de lo esperado… podrás crear un camino lleno de virtudes.
Soñar es fundamental para nuestro crecimiento personal y de nuestro entorno.
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Razones para tener sueños en ti vida
- Ver obrar a Dios en tu vida.
- Tener deseo e impulso de vivir.
- Para cambiar la vida de otras personas.
- Para dejar un legado.
La importancia de iniciar y retomar tus sueños
En esas cuatro razones se condensa la importancia de nuestros sueños (esto lo iremos desarrollando con detenimiento en varios artículos) pero, antes de entrar en el tema, es de suma importancia que puedas visualizar los obstáculos internos o externos que tal vez te hayan impedido confiar en tus sueños y abandonarlos.
Toma una pausa y revisa cuales eran tus anhelos; esos sueños engavetados y no tengas miedo de retomarlos. Nunca es tarde para retomar el vuelo, porque nuestro Señor es nuestro principal guía. Confía en él y confía en ti misma y empieza a tomar acción.
Tatiana mendez
Posted at 10:19h, 17 DecemberHola Dios los bendiga