07 Oct Tener fe es una decisión
Tú tienes que entender que, en las alternativas, tú puedes escoger cuál peligro prefieres tomar…
Hay un peligro cuando vivimos sin Fe. Porque cuando vivimos sin fe, nunca progresamos ni alcanzamos nada en la vida.
Mientras que existe otro peligro de no tener sueños. Porque cuando no tenemos sueños, el peligro que corremos es el de carecer de razones para activar nuestra fe.
Entonces, si lo analizamos bien, ambas situaciones caminan de la mano, porque la fe sin obra, es muerta, y los sueños sin fe, no son sueños.
Ahora, mi pregunta es: ¿Qué haces todos los días para avivar tu fe y para alcanzar tus sueños?
Te invito a que confíes en el Señor, a que pongas todos tus planes y proyectos en sus manos para que te guíe y te conduza por donde sólo Él sabe que debes ir.
Pero tú también poniendo de tu parte, trabajando de la mano para acrecentar tu fe y trabajando con fe para alcanzar tus objetivos.
Recuerda que uno de mis propósitos principales es ayudarte a inspirar tu vida para que vivas tu máximo potencial como mujer y alcenes el éxito en todas las áreas de tu vida.
Y antes de despedirme, quiero invitarte a que leas uno de mis libros, “Mujer, sueña”, el cual te ayudará a entender que eres capaz de superar tus propios límites y en donde podrás profundizar un poco más acerca de todo lo que aquí te hablo…
¡Ten fe, y ve por tus sueños…!
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