198: Yo y mi casa

18 Dec 198: Yo y mi casa

Hoy es 18 de diciembre, es un día especial para mí, porque hoy estoy de cumpleaños y si me sigues en mis redes sociales has visto varias celebraciones, hoy es oficial, hoy cumplo 50 años de edad, y estoy súper contenta y emocionada y compartir este día con cada una de ustedes en mujer podcast, algo que yo he aprendido a lo largo del tiempo es que los mejores regalos que tú puedes recibir son aquellos que puedes dar.

En el día de hoy yo quiero que mi regalo de cumpleaños, sea darle a cada una de ustedes un mensaje que yo sé, que va a impactar tu vida y no sola la tuya, sino de aquellas personas que están a tu alrededor.

Escucha el Episodio Completo Aqui!

En el episodio de hoy quiero tratar un tema que he titulado yo y mi casa, te quiero hablar acerca del poder de una familia que le sirve a Dios, alguien me dijo un día que me lo he dejado de pensar, me dijeron que a los cincuenta años tú llegas a darte cuenta de que probablemente has vivido más de la mitad de tu vida, eso asumiendo que la mayoría de la gente no llega a los cien años, así que cuando cumplas cincuenta años, como que ya viví más de la mitad de vida y probablemente un gran chance.

La realidad es que nadie sabe cuándo va a llegar ese momento en el que cerremos los ojos estando sobre esta tierra y los abramos delante de la presencia de nuestro Dios, es algo que solo Dios lo sabe, peor lo que sí puede saber, ahora mismo es que vas a hacer estando sobre esta tierra.

¿Me creerías si te dijera que Sabías que una piedra sirve para construir y para destruir? ¿Sabes tú cuál es la mejor herencia que les puedes dejar a tus hijos? ¿Qué crees tú que va a pasar con tus hijos y con tus nietos cuando tú hayas ido a morar delante de la presencia del señor? ¿Qué pasaría si yo te dijera que una parte de ti, que tú puedes dejar y que quedara viva para las generaciones que viven detrás de ti?

Te has preguntado si tienes la capacidad de responder con toda seguridad estas preguntas. Me gustaría leer tus respuestas a estas preguntas, en la caja de comentario.

Terminando con lo anterior, continuemos nuestra lectura.

Cuál es el legado y la herencia que vas a dejar aquellas generaciones que vienen detrás de ti, cuando las personas piensan en dejar herencia a sus hijos, la mayoría empiezan a pensar en casas, en propiedades, en educación universitaria, esas cosas son importantes y debes de tomarlas en cuenta para dejarle herencia a tus hijos, pero en el episodio de hoy te quiero hablar de la mejor herencia que tú puedes dar a tus hijos, espero que al igual que yo esté con mucha expectativa de escuchar esto.

Apenas estoy cumpliendo 50 años, yo sé que me faltan muchas cosas por vivir y muchas cosas por alcanzar si Dios en su infinita misericordia me lo permite y no quiero que tengan la impresión de que me estoy despidiendo de nadie ni nada por el estilo.

Qué crees tú que va a pasar con tus hijos y con tus nietos cuando tú hayas ido a morar delante de la presencia del señor y no me refiero solamente a lo económico, a los bienes materiales, cuál crees tú que va a ser el camino por el que van a caminar tus futuras generaciones una vez tú ya o estés en esta tierra.

¿Alguien dirá que como ella sabrá que van a hacer mis nietos, mis bisnietos después de mí? Qué pasaría si yo te dijera que una parte de ti, que tú puedes dejar y que quedara viva para las generaciones que viven detrás de ti, no solo te voy a decir que no solo es una posibilidad, sino que también tienes el deber de dejar una herencia a tus hijos, nietos y bisnietos y todos aquellos que vienen en tu linaje.

Una herencia que supera lo material, lo económico, una herencia espiritual, hay una historia que me cautiva el corazón, el pueblo de Israel había soñado de llegar a la tierra prometida, habían luchado y sufrido en el desierto yendo detrás de esa promesa, pero al final por su desobediencia y por falta de fe, la primera generación aquella que salieron de Egipto, no lograron entrar a la tierra prometida, tú sabes quienes entraron los hijos de aquellos que salieron, los hijos de aquellos que caminaron por el desierto, no fue Moisés quien introdujo a la tierra prometida, fue Josué. 

Hay un primer punto y es una de las cosas que tus futuras generaciones pueden hacer; que tú soñaste con hacerlas, hay cosas que tú vas a lograr, no en tu propia vida, sino en el camino que tú dejas trazado para tus hijos y los hijos de tus hijos. 

Cuando Josué estaba a punto de hacer pasar al pueblo esta segunda generación de librado de Egipto, Dios les dio una instrucción bien importante que Josué se la da al pueblo, la instrucción de Dios era puntual, cuando pasen el río Jordán para entrar a la tierra prometida cada líder de cada tribu y eran doce tribus tomen una piedra del fondo del río, tomen la piedra donde están firme los pies de los sacerdotes y levanten en el lugar donde van a pasar la noche.

Tus hijos van a tener una piedra del lugar donde están firmes tus pies.

Dios le dijo a Josué, que el lugar donde tuvieran firme los pies de los sacerdotes, de ahí tomaran esas doce piedras, eso es tan representativo de lo que tú debes hacer como madre, yo creo que cada madre que me está escuchando en este momento, tú debes de tomar una piedra de ese punto de ese lugar donde está firme tus pies, esa piedra de donde están tus convicciones, tu seguridad y tu vida espiritual. 

Quiero decirte que hay un compromiso sobre cada mujer, sobre cada madre que está criando las futuras generaciones, tú tienes el deber de involucrarte con ellos, de imponer una fe que provenga de tu propia fe, esto hace que haya una mayor responsabilidad para ti, tú tienes que cuidar siempre donde están parados tus pies, a donde están firmes tus pies, lamentablemente algunas madres y padres no tienen sus pies firmes sobre piedras que edifican.

Sabías que una piedra sirve para construir y para destruir, en el tiempo de antes se usaban piedras para construir los hogares, para levantar altares, para encender hogueras, pero usaban piedras también para herir a las personas, para derribar puertas, para abrir muros y hay padres y madres cuyos pies están firmes sobre piedras de engaños, mentiras, de malas actitudes, 

padres sobre pies que están firmes de hablar mal del pastor e incluso no ir a la iglesia, orar, no leer la biblia con sus hijos.

Lo quieras o no, tú estás tomando piedras o no del lugar   donde están firmes tus pies y luego van a hacer para tus hijos.

Toda piedra que tú pises será la piedra que pisaran tus futuras generaciones.

Mira la razón de porque Dios le da la razón a Josué esta instrucción para ser transmitida al resto del pueblo, y es aquí donde Josué 4:21-24 Y habló a los hijos de Israel, diciendo: Cuando mañana preguntaren vuestros hijos a sus padres, y dijeren: ¿Qué significan estas piedras? Declararéis a vuestros hijos Israel paso en seco por este Jordán, porque Jordán vuestro Dios saco las aguas del Jordán de parte de vosotros hasta que habías pasado a la manera que Jehová lo había hecho en el mar rojo, el cual seco delante de nosotros hasta que pasamos para que todos los pueblos conozcan que la mano de Jehová es poderosa; Para que temáis a Dios vuestro Dios todos los días.

Las piedras que tú tomes en tu vida, sobre las cuales tú afirmas tus pies, serán una señal para tus hijos de los que tú vives en tu propia vida y serán la prueba palpable del poder y el amor a Dios para con tus hijos.

Hablemos de tres piedras, puedas que puedas tomar para tus hijos y pienses por un momento en cuál son esas piedras sobre los cuales tú estás afirmando tus pies para que sean las piedras que tus hijos están viendo, esas piedras estaban en el fondo del río cubierto por agua, pero luego fueron sacadas del agua y quedan a la vista de todas las personas.

Sabes madre, hay cosas que tú crees que las podrías estar haciendo en privado y no van a afectar a tus hijos, cuidado con esto porque estas piedras siempre van a quedar expuestas, yo no estoy regañando a nadie menos en el día de mi cumpleaños, yo quiero usar esta historia, para ayudarte y motivarte para que afirmes tus pies sobre piedras de bendición, sobre piedras que construye.

Hay tres piedras de las cuales debes de afirmar tus pies para que queden como herencia y señal para tus hijos.

1º  LA PIEDRA DE LA DETERMINACIÓN.

Tienes que tener determinación en tu vida, no puedes vivir de una manera o un estilo de vida que estés de un lado para otro, tienes que ser decidida, firme y persistente en tus convicciones, más adelante llego un momento en el que el pueblo de Israel se puso a desenfocarte e irse en otras direcciones, pero Josué fue determinado en su convicción, y en Josué 24:15  Y si mal os parece servir a Jehová, escogeos hoy a quién sirváis; si a los dioses a quienes sirvieron vuestros padres, cuando estuvieron al otro lado del río, o a los dioses de los amorreos en cuya tierra habitáis; pero yo y mi casa serviremos a Jehová.

La determinación de Josué iba más allá de su propia vida, su determinación era para él, sus hijos y sus futuras generaciones, toma la piedra de la determinación, decide por ti, pero toma una decisión que va a afectar a todos los que viene detrás de ti.

2º LA PIEDRA DE ENTREGA.

Hay una madre en la biblia y la historia la amé impresiona demasiado, su nombre es Ana, Ana quería sobre todas las cosas tener un hijo, pero no podía quedar embarazada, un día cuando el señor le dijo, si te acuerdas de mí y me das un hijo varón yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, resulta que Dios le concedió su petición; sabes lo que hizo Ana, En primera de Samuel, 1:24 cuando desteto al niño y lo llevo a la casa de Dios inmediatamente.

 Mujer, madre, yo quiero que tú sepas algo, tus hijos les pertenecen a Dios, es importante que tú les enseñe la piedra de entrega que ellos puedan llegar al punto como Samuel, de tanto estar en la casa de Dios que pudo decir, habla señor que tu siervo escucha.

3º LA PIEDRA DE LA PASIÓN.

Jeremías fue un profeta que de pequeño supo que había sido separado para Dios, desde pequeño Jeremías escuchaba la voz de Dios, ahora la biblia no lo dice explícitamente, pero para Jeremías siendo muy niño pudiera escuchar la voz de Dios solo pudo haber sido porque tuvo padres que estaban criando a Jeremías escuchando la voz de Dios.

Siempre he dicho que muchas personas que están en la iglesia sirviéndole a Dios son el producto de una madre, abuela que oraba por sus hijos y nietos, esa pasión la vemos en Jeremías 20:9, “había como un fuego ardiente metido en mis huesos…”

Quiero cerrar con una pasión transmitida por dos mujeres, dos madres hacia un muchacho que se convirtió en uno de los más grandes exponentes del evangelio, mira la disposición, se apostó pablo hacia las abuelas y la madre de Timoteo, 2 Timoteo 1: 5-6 trayendo a la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice, y estoy seguro de que en ti también. Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos.

Ese mismo fuego, esa misma pasión que había en Jeremías desde pequeño, había sido transmitida a Timoteo por medio de las dos mujeres de influencia en su vida, su abuela y su madre, tú tienes no una sola oportunidad, sino un deber imperativo de tratar a tu familia a los pies de Cristo y de dejar una herencia al servicio de determinación, de entrega y de pasión a todos aquello que vendrán después de ti.

Qué hermoso privilegio te da Dios, de ser la iniciadora de una llama que ardiera para siempre en las vidas de tus hijos, tus nietos y tus futuras generaciones, que mejor regalo de cumpleaños para mí que transmitirte esta hermosa responsabilidad de determinar que tú y tu casa servirán al señor.

Por último, me gustaría agradecer a todas esas mujeres, que decidieron invertir un par de minutos de su vida leyendo.